Analizando un scanner.

Tengo un cacharrito nuevo y voy a contaros que tal es. Vaya de antemano que es por lucimiento personal y en todo caso para dar envidia, porque no creo de ninguna manera que tengáis ni pensamiento de tener algo parecido.

El aparato en cuestión es un scanner, pero antes de contar que me parece voy a contar un poco por encima el proceso de compra, que es lo que puede asustar a cualquiera. Digamos que a mayor escala es un ejemplo bastante claro de lo que contaba El tendero digital en este post. Oye, que si tenéis un rato daros una vuelta por el blog de este hombre, que esta muy pero que muy bien.

Vamos al lío. Teníamos un scanner de HP formato A4 bastante desgastado. El caso es que hablando con el Cheriff quedamos en que nos vendría muy bien comprar uno de A3. Una conversación del tipo:

- Oye huma, escanéame esto.
- No puedo, eso es un A3.
- ¿Lo que?
- El formato, no busques el coche…
- Ahhh, que susto.

Después de buscar opciones y darme cuenta que es un mercado sin demasiado tirón, pues le propongo dos aparatejos, un HP Scanjet N9120 y un Epson GT-2000N Pro. No tengo ninguna esperanza de que se realice la compra ya que los precios según la web del fabricante son 2490 y 3447€ Respectivamente.

Estos son los candidatos:





El porque de estos modelos es sencillo. Nosotros tenemos 3 premisas, la primera que sea de A3, la segunda que tenga alimentador y la tercera es que tenga superficie horizontal, que sea de los que tiene cristal. Nos la sopla la velocidad, resoluciones, conexiones etc etc. ya que cualquiera de los del mercado nos vale en esos aspectos, pero lo de que tenga cristal es impepinable, ya que escaneamos cosas rígidas.
Yo le doy al Cheriff las propuestas, le remarco las necesidades y comienza el periplo. Supongo que interviene en el proceso mi querido y amado Cheriff, su jefe el jefe del jefe y hasta un maestro Jedi. Entrara en el bombo compras, informática y le pedirán opinión hasta a la señora que limpia en el turno de noche, el caso es que a mi no me pregunta ni dios.
Trascurrido mas de un mes, me llega una caja con esto:



Un scanner Fujitsu modelo fi-5530C2 la mar de mono, pero sin cristal.

Me echo unas risas, no pienso ni en desembalarlo y me pongo en marcha. Voy a por el Cheriff, le meto presión por el gambazo y le digo que hay que devolverlo. Pasada una semana la caja sigue junto a mi mesa y como toda esta vorágine administrativa funciona chachi guay, pues vuelta a por el Cheriff, mas presión y nuevo recordatorio de que hay que devolverlo. Sigue perfectamente engrasada la maquinaria y tras otras dos semanas la caja no se mueve ni un milímetro, vuelvo a la carga y después de una vacilada a dos manos, al Cheriff y al informático que pasaba por allí, pues por fin se ponen en marcha. Pasa otra semana mas y me llama el informático para decirme que les admiten la devolución, pero como se ha pasado el plazo que hay que cogerles otro producto. Me comenta que solo nos pueden ofrecer un producto que cumpla con nuestras necesidades, así que hay que pillarlo o si o si. Por fin se lleva la caja que tengo aquí aparcada y después de unos diez días, aparece en la oficina una caja con el siguiente aparato.



Otro Fujitsu modelo fi-5750C

Pues si, se puede flipar en colores, alucinar pepinillos o cualquier expresión chorra que se os ocurra. Tengo encima de la mesa un scanner A3 que vale mas de un millón de las antiguas pesetas y unas tremendas ganas de llamar tonto a todo el que haya intervenido en la compra. Me las reprimo porque es un juguete acojonante. Al principio he comentado que iba a contar que tal es, así que allá voy:

“Es muy grande.”

“Se escanea 25 hojas a doble cara con una resolución de 200x200 pixeles en aproximadamente 32 segundos.(comprobado)”

Que mas quereis que os diga. Con esto es suficiente. Es una draga. Me sobra scanner por todos los lados, esto no tiene aquí ningún sentido, pero oye, presumo de cacharro.

Después de montarle ha pasado el Cheriff y le he preguntado que si tiene algún inconveniente en que me saque un pellizco haciendo chapucillas, que se yo, puedo hacerle trabajos al ministerio de justicia, o pasarme a formato digital la biblioteca de Alejandria. No lo pilla y se ríe, a fin de cuentas, el millón doscientas no era suyo….

Si alguien necesita que le escanee bien baratito por encima de las 500 hojas que me contacte, que yo encantado.